CRISTO (Retomando los fundamentos)


CRISTO

(Retomando los fundamentos)


Cross-Eyed -- Modern Contemporary Abstract Painting by California Daily Painter JJ Jacobs



Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente.
(Mateo 16:16)


Esto respondió Pedro cuando Jesús preguntó a sus discípulos sobre su identidad. Después, Jesús les explicó que la revelación de su deidad no era humana sino que provenía directamente de Dios, y que sobre esa roca fundaría su iglesia, es decir, sobre la revelación de la deidad de Cristo. De ese modo, los integrantes de su Iglesia somos aquellos que hemos reconocido a Cristo como el Hijo de Dios.


Esto me hace pensar que los cristianos pueden ser definidos de dos maneras, la primera es como seguidores de Cristo y sus enseñanzas, lo cual es muy difícil porque se puede ser descalificado como cristiano debido a los errores que acompañan a la naturaleza humana. La segunda es, que cristianos son aquellos quienes reconocen a Cristo como Hijo de Dios, esta descripción no pone el énfasis en las acciones de las personas sino en la gracia misma y en la fe. Es por eso que me identifico más con esta segunda definición.

Recientemente estudiaba de nuevo la identidad de Jesús. A los que tenemos mucho tiempo siendo cristianos puede parecernos absurdo regresar a enseñanzas tan básicas que aparentemente tenemos dominadas. Pero cuando lo estaba haciendo redescubrí la importancia de tener los fundamentos bien firmes, redescubrí la utilidad de tener presente en todo momento la deidad de Cristo y su obra redentora, para seguir fortaleciendo la fe.

No es ninguna novedad que gracias a la globalización, el internet y las redes sociales podemos alimentarnos de todo tipo de ideas y personas. Por un lado resulta bastante enriquecedor escuchar diversas opiniones y enseñanzas de gente entregada a la predicación del evangelio que contribuyen a hacernos crecer en fe. Sin embargo, en este mundo de información también puede ser fácil perder la esencia de nuestra fe y que los fundamentos de nuestra doctrina se muevan a causa de enseñanzas que no toman la revelación del Cristo como su base.

Así que es un buen momento para recordar que el amor de Dios es tan grande que mandó a su hijo al mundo para que todo aquel que en él cree no se pierda, sino que tenga vida eterna (1). Que el único camino que nos da vida y nos lleva al conocimiento del Padre es Jesús (2) y que solo Jesucristo puede ser mediador entre Dios y los hombres (3).

Es muy fácil confundirnos porque hay muchas enseñanzas que hablan de espiritualidad y que pueden tener un mensaje congruente y piadoso. Sin embargo, no es lo mismo ser espiritual que conocer al Padre celestial, no es lo mismo ser espiritual que tener la vida eterna, por eso Jesús dijo: “Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado.” (4)

En lo personal, he comprobado que Cristo es el Hijo del Dios viviente debido a mis propias experiencias. No me considero cristiana porque aprendí la doctrina de mis padres y repetí su tradición, lo soy debido a que verdaderamente creo en la deidad de Cristo, pues a lo largo de mi vida he podido comprobar su infinito amor hacia mí y he experimentado su salvación no solo como mi pase al cielo, sino que he sido salvada de muchos problemas a los que me he enfrentado en este mundo terrenal, tangible y material. He comprobado su salvación tan repetidamente que no me quedan más dudas de lo que creo, en quién creo y por qué lo creo.

Hay un pasaje que dice que “el que se acerca a Dios crea que él existe, y que sabe recompensar a quienes lo buscan.” (5) Por eso he sido recompensada muchas veces, por poner mi fe en él, lo que me ha motivado a compartir mi experiencia deseando que más personas le crean y también reciban su recompensa.

Así que a los cristianos que me leen lo invito a recordar los fundamentos de nuestra salvación, a que reafirmen su conocimiento de Cristo para que no dejen de experimentar su salvación en todas las áreas de su vida. Pero a quien no le haya sido sido revelado que Cristo es el Hijo de Dios, lo invito a hacerlo, le aseguro que encontrará una gratificante recompensa.


Mary Carmen Olague




1 Juan 3:16
2 Juan 14:6
3 2 Timoteo 2:5 RV1960
4 Juan 17:3
5 Hebreos 11:6 RVC

Comentarios

  1. Interesante reflexión de la identidad de Cristo, pero también nuestra identidad como sus seguidores.

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  2. Interesante reflexión de la identidad de Cristo, pero también nuestra identidad como sus seguidores.

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