EL PROBLEMA: LA POSIBILIDAD DE UN MILAGRO

EL PROBLEMA: LA POSIBILIDAD DE UN MILAGRO Vía: pngtree La semana pasada escribía sobre los aprendizajes que nos dejan los problemas. En resumen, mencionaba que si tenemos un corazón sensible, las adversidades sirven para que no olvidemos que dependemos de Dios; enfatizando que estas no son enviadas por él, ni le place tenernos por mártires. ¿Por qué regreso a este tema? Porque justo, esta semana fue mi oportunidad de probar la teoría que plantee la semana pasada: el problema sirve para probar nuestra fe. Esta semana viví una situación, que vista con unos días de distancia no parece tan grave, aunque, como suele suceder, en el momento se me cerró el mundo. Necesitaba que se resolviera un trámite y no sólo el trámite no avanzaba, sino que mi expediente se había perdido y mis datos no aparecían en el sistema. La lógica natural, la humana, carnal y terrenal, me llevó a que literalmente se me bajara el azúcar. Es normal preocuparnos cuando las cosas no salen como esper